Medidas de Educación Usando la Política de la Recompensa y el Castigo

Domingo 29 de Julio de 2012 16:29

Medidas de Educación Usando la Política de la Recompensa y el Castigo

Las siguientes medidas, con la voluntad de Allah, protegen al niño contra cualquier enfermedad psicológica, desviaciones morales y desequilibrios sociales. Las medidas más importantes son:

1 - Moderación en la Aplicación de Castigos y Recompensas:

La peor política que ha perjudicado a muchas generaciones, es la intimidación y la focalización en el castigo físico. Esto convierte al niño en una persona violenta bruta o en un débil cobarde que puede ser fácilmente llevado y controlado por cualquier persona ([1]). Por eso disciplinar al niño debe ser gradual, dado que la educación es un proceso progresivo de muchos pasos. Si el padre/educador comienza con el castigo más agresivo, entonces él quedará sin otras opciones; porque él no usó las posibilidades disciplinarias más indulgentes en primer lugar. El castigo debe ser el último recurso y la solución final que los padres deben utilizar con el niño ([2]), deben darle una oportunidad a niño y perdonarlo si alguien intercede y pide a los padres que no castiguen al niño, dándole otra oportunidad ([3]). El exceso de intimidación y castigo puede hacer que cometer errores sea algo fácil para el niño, dado que él se acostumbrará a ser castigado por los padres con golpes ([4]). Por lo tanto, debemos evitar el uso de una disciplina o castigo todo el tiempo, más bien es mejor utilizar la orientación, la persuasión y la firmeza.

El educador/padre no debe exagerar en amenazar al niño sin seguir una medida real o disciplina, puesto que el niño eventualmente subestimará la amenaza y no la escuchará más. El padre debe aplicar el castigo al menos una vez, por supuesto si el niño merece ser castigado, por lo que el padre mantiene su imagen como padre o madre respetable que cumple sus palabras ([5]).

También, la exageración en premiar al niño y colmarlo con regalos conducirá a la codicia. El niño no estará convencido con las recompensas a menos que sean mucho más de lo que los padres le dieron anteriormente ([6]).

El padre debe evitar el uso de cualquier lenguaje abusivo como regaños o insultos, durante el castigo del niño ([7]), ya que esto perjudica al niño y le hace sentirse pequeño, ofendido y despreciado. Incluso el niño podría llegar odiar a sus padres, dado que él se sentiría como una víctima ([9]), por lo tanto, el padre o educador debe aclarar al niño que lo disciplina para su bien y no debido a un rencor u opresión injustificada ([10]).

El padre/educador debe evitar el uso de la política de la pena y la recompensa excesivamente, en una forma que llevaría al niño a temer a las criaturas más que temer al Creador. El padre debe orientar al niño para que tema a Allah el Todopoderoso más que nada, advirtiéndole del castigo de Allah en la vida presente y en el más allá. El padre debe ser muy cuidadoso de no educar al niño para obedecer y buscar la felicidad de las personas sin obedecer a Allah, buscando su misericordia y temiendo de su ira ([11]). Agradar a las personas no debe ser la prioridad u objetivo del niño, sino buscar el perdón y la misericordia de Allah. El padre nunca debe intimidar al niño y hacerle sentir miedo de policía, los médicos, la oscuridad o cualquier fantasía e imágenes irreales como monstruos, etc., porque no queremos ciertamente que el niño crezca y se convierta en una persona tímida o cobarde.

Algunos padres intimidan al niño haciendo que tenga miedo de la tortura de Allah y el fuego infernal, y no mencionan ninguna de las bendiciones, misericordia y placeres del Paraíso y el más allá. Demasiada intimidación sobre el Infierno podría hacer que el niño no considere el castigo de Allah o el infierno. Los padres no deben decir al niño "entrarás en el infierno" o "Allah te castigará por hacer tal o cual cosa" todo el tiempo y olvidar recordarle el Paraíso y la buena recompensa de Allah. Deberían asegurarse de mantener un equilibrio al mencionar el Paraíso y el infierno. No debemos juzgar o decir que alguien va ir al cielo o se va a curar, sino más bien decir que quien no reza no entrará al Paraíso y será torturado en el infierno.

2 - Teniendo en cuenta las Diferencias Individuales:

La sabiduría del padre/educador se refleja en la elección del método educativo adecuado de acuerdo a diferentes aspectos, tales como:

* El castigo y la recompensa deben ser adecuados con la edad del niño. Cuando el niño tiene uno o dos años de edad, es suficiente con fruncir el ceño por un corto tiempo o no darle algo que le gusta cuando él comete un error. Cuando él tiene tres años de edad, podemos castigarlo impidiéndole jugar con sus juguetes favoritos por un tiempo o prohibiéndole salir a jugar con los compañeros o vecinos en el parque ([12]).

* El castigo debe adaptarse al tipo de error que ha cometido, por ejemplo, si rompe su juguete o lo abandona entonces se le debe impedirse jugar con él. Si ensucia la casa y tira las cosas, debemos pedirle que organice el desorden que ha causado. Si hizo demasiado daño, entonces, no es práctico pedirle que lo repare, especialmente si es demasiado pequeño ([13]).

* El castigo debe ser apropiado con la naturaleza del niño. Algunos niños son sensibles y tímidos por naturaleza, por lo que sería suficiente con que se les reprenda. Algunos niños son tercos por lo que nada es apropiado para ellos, excepto un castigo firme ([14]). A veces privar al niño de un juguete que ama es mucho más duro que pegarle o darle nalgadas, y a veces prohibirle ver a sus amigos es mucho más duro y efectivo como castigo que privarlo del dinero de bolsillo o caramelos.

* El castigo debe adaptarse a la situación, dado que el niño podría estar escondiendo su error por lo que sería mejor ignorarlo y ocuparse de la situación desde la distancia. Si se repite el error, entonces, él debe ser castigado en privado sin anunciarlo ante el resto de los miembros del hogar, porque diciendo a todo el mundo sobre su error le hará a sentirse tan tímido y vulnerable al revelar lo que él ha mantenido en secreto ([15]).

El niño podría cometer el error frente a los familiares o extraños, por lo que el castigo se debe aplazar hasta que el padre esté a solas con el niño. Castigar al niño en frente de otros será quebrar su moral y hacerlo sentir apocado o despreciado ([16]), el niño también podría tornarse terco y repetir el error, debido de ser castigado frente a personas extrañas y él podría incluso perder su timidez.

* El castigo y la recompensa deben utilizarse de forma diferente y gradual, porque su constante repetición puede disminuir la eficacia del método ([17]).

* Teniendo en cuenta las diferencias individuales durante la crianza de los niños, los hijos adultos o adolescentes deben ser castigados en privado, porque son maduros y sus hermanos menores deben respetarlos y no verlos en tal posición vulnerable. Sin embargo, el hijo debe ser castigado en frente de otros hermanos si su error es claro y conocido por todo el mundo, pero el padre/educador debe ser cuidadoso en la forma en que él amonesta a su hijo adolescente, dado que a veces, culparlo demasiado puede poner en peligro la relación entre el padre y el adolescente ([18]). El padre debería también ser prudente en la manera en que dirige a su hijo mayor, porque el hijo suele ser el modelo a seguir de sus hermanos. Él es el hombre de la casa cuando su padre está ausente, enfermo o fallece, por lo que el hermano mayor siempre debe ser respetado.

* El sexo del niño es también una diferencia individual, el tipo de castigo que se adapta y funciona con la hija puede ser diferente de la clase de castigo necesario para disciplinar al niño. La hija se disciplinada y dirige fácilmente debido a su sensibilidad, mientras que el padre tiene que ser más duro con su hijo.

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([1]) Muqaddimah (conocido como Prolegomenon en inglés) Ibn Yaldún: página 508.

([2]) Manhay Al-Tarbia Al-Islamia por Mohamed Qutb: página 379.

([3]) Tarbiat Al-Aulad Fil Islam por Abdullah Naseh Elwan: 2/727-728.

([4]) Manhay Al-Tarbiah Al-Nabwiiah, por Mohamed Nour Swaid: página 27.

([5]) Manhay Al-Tarbiah Al-Islamia por Mohamed Qutb: 380 de la página.

([6]) Kaifa Nagael Min Al-Tifl Rayul Al-Mustaqbal por Bahia Abu Sabit: página 20.

([7]) Mushkilat Tarbawiiah por Mohamed Rashid Al-Owaid: página 32-36.

([8]) Kaifa Nourabi Teflan por Mohamed Ziad Hemdan: página 34.

([9]) Al-Tarbia Al-Islamia por Suliman Al-Haqeel: página 61.

([10]) Tarbiat Al-Aulad Fil Islam por Abdullah Naseh Elwan: 2/727-728.

([11]) Min Ajta’na Fi Tarbiat Auladan por Mohamed Al-Saheem: 12-17, 72-76.